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La economía mundial se basa en la logística. Si lo pensamos bien, hasta las primeras formas de comercio se basaban en el intercambio y el transporte de mercancías allí donde hubiera demanda. A medida que la industria y la tecnología avanzaban y las cadenas de suministro se hacían más complejas, aprendimos mucho sobre cómo hacer bien la logística. Cuesta creer que nuestros antepasados sobrevivieran sin las ventajas de la comunicación instantánea y la banca moderna, pero lo consiguieron.
A medida que el transporte se hacía más rápido y predecible, nacían nuevas industrias, surgían naciones que se fortalecían y seguíamos aprovechando las lecciones aprendidas sobre asociaciones, innovación y cadena de valor.
Donde antes nuestras mercancías eran trasladadas del punto A al punto B por un único transportista, ahora es bastante habitual que un envío aproveche múltiples transportistas y modos de transporte de camino a su destino, dando lugar a misiones cada vez más complejas y variadas. Es difícil imaginar dónde estaría ahora el mundo si no contáramos con una red logística mundial fiable.
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Impulsados por la demanda
La logística es una industria impulsada por la demanda. Lo que hemos visto y vivido el año pasado ha hecho historia en todos los sentidos de la palabra. Por un lado, ha puesto a prueba nuestros límites. En otro, ha sacado lo mejor de lo que hacemos, ha fortalecido nuestro sector y ha ayudado a otros a capear el temporal.
Uno esperaría que lo peor hubiera quedado atrás, pero sabemos que no hay tiempo para descansar. Como industria, nos hemos enfrentado a los retos que se nos han presentado y hemos descubierto mejores formas de trabajar y servir a nuestros clientes. También hemos explorado el camino que nos queda por recorrer, movilizado nuestros recursos y planteado la pregunta: "¿Adónde vamos ahora?".
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¿Cuál es el futuro de la logística?
Podría decirse que la transformación más significativa de la logística se ha producido en el ámbito digital. La tecnología desempeña ahora un papel esencial para ayudarnos a conectar todos los eslabones dispares de la cadena de suministro y ha acelerado la transformación para dar cabida a nuevos sistemas, normas y expectativas de los clientes.
Más allá de la transformación digital, la crisis sanitaria y el medio ambiente siguieron siendo prioritarios, y probablemente lo seguirán siendo.
Las organizaciones que optaron por ignorar o minimizar el impacto de la pandemia, las guerras comerciales mundiales y los aranceles en la cadena de suministro se volvieron vulnerables. A medida que la demanda seguía aumentando, impulsada por el dominio del comercio electrónico, los principales actores se quedaron en el camino mientras surgían nuevas dinastías.
Hemos aprendido que el desarrollo digital no reduce nuestra huella de carbono, sino que la aumenta, lo que hace recaer en la logística la responsabilidad de ofrecer una estrategia tanto desde el punto de vista empresarial como medioambiental.
Las empresas aprendieron que un socio logístico fuerte es fundamental para el crecimiento y, de hecho, puede ser un factor estratégico en todos los aspectos del negocio, desde la fabricación hasta la comercialización y, en última instancia, el cumplimiento.
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Cómo ayuda el DTS
DTS World Cargo es un proveedor logístico orientado al futuro que comprende las necesidades y los retos a los que se enfrentan nuestros clientes en la actualidad y lo que será importante para ellos en el futuro. Nuestro equipo trabaja duro para garantizar que se satisfagan las necesidades de su negocio, ofreciendo un servicio personalizado y un rendimiento con el que pueda crecer. Póngase en contacto con nosotros hoy mismo para solicitar un presupuesto; nos encantaría conocer mejor su empresa y mostrarle cómo podemos ayudarle.
